¿Qué son las cuerdas para trabajos verticales?

Las cuerdas para trabajos verticales son componentes esenciales en las labores que implican trabajar a alturas significativas, como la construcción, el mantenimiento de edificios y el rescate. Estas cuerdas están diseñadas específicamente para soportar el peso y las tensiones que se generan durante las maniobras en vertical, asegurando la seguridad y la eficiencia del operario.

Importancia de las cuerdas en trabajos de altura

La seguridad es la principal preocupación cuando se trabaja en altura. Las cuerdas utilizadas en estos contextos no solo deben soportar el peso del usuario, sino también resistir condiciones ambientales adversas, fricción constante y posibles impactos. Estas cuerdas están fabricadas con materiales de alta resistencia y sometidas a rigurosas pruebas de calidad para cumplir con las normativas de seguridad internacionales.

Existen diferentes tipos de cuerdas para trabajos verticales, cada una con características específicas que las hacen adecuadas para distintas aplicaciones. Es crucial seleccionar la cuerda correcta según el tipo de trabajo y las condiciones en las que se va a utilizar, ya que una elección inapropiada puede comprometer la seguridad del operario y la eficacia del trabajo.

Las cuerdas para trabajos verticales se clasifican principalmente en tres tipos: cuerdas dinámicas, cuerdas estáticas y cuerdas semiestáticas. Cada tipo tiene características específicas que las hacen adecuadas para diferentes aplicaciones en trabajos de altura y actividades relacionadas. A continuación, exploraremos las diferencias fundamentales entre estos tres tipos de cuerdas, con especial énfasis en las cuerdas semiestáticas o Tipo A, que son las más utilizadas en trabajos verticales conforme a la normativa EN 1891.

Cuerdas dinámicas

Están especialmente diseñadas para absorber la energía generada durante una caída, reduciendo así la fuerza de impacto tanto sobre el usuario como sobre los puntos de anclaje.

Características

• Elasticidad: Pueden estirarse hasta un 30% de su longitud original. Esta elasticidad es crucial para amortiguar las caídas, minimizando el choque y el riesgo de lesiones.
• Resistencia: Están fabricadas con materiales de alta resistencia, como nylon, que les permiten soportar cargas elevadas y las fuerzas dinámicas generadas durante una caída.
• Construcción: Generalmente, tienen una estructura de doble trenzado, con un núcleo interior (alma) que proporciona resistencia y una funda exterior (camisa) que protege el núcleo y ofrece resistencia ante la abrasión y el desgaste.
• Certificaciones: Deben cumplir con normas internacionales como la EN 892 para ser utilizadas en actividades de escalada y rescate. Estas certificaciones garantizan que la cuerda ha sido sometida a pruebas rigurosas de resistencia y alargamiento.
• Diámetro y peso: Varían en función de su uso específico, oscilan entre 8.5 mm y 11 mm. Un mayor diámetro generalmente proporciona mayor resistencia y durabilidad, pero también implica un mayor peso.

Cuerdas estáticas

Están diseñadas para ofrecer un alargamiento mínimo bajo carga, proporcionando estabilidad y control en diversas aplicaciones de trabajo en altura.

Características

• Baja elasticidad: Tienen una elongación máxima de alrededor del 5% bajo carga, lo que significa que se estiran muy poco cuando se aplica peso. Esta característica las hace ideales para situaciones donde se requiere precisión y estabilidad.
• Elevada resistencia: Están construidas con materiales robustos como poliéster o aramida, que proporcionan una gran resistencia a la tracción y al desgaste. Esto asegura que la cuerda puede soportar cargas pesadas y condiciones adversas sin comprometer su integridad.
• Construcción robusta: Suelen tener una construcción de doble trenzado, con un núcleo interno (alma) que proporciona la resistencia principal y una funda externa (camisa) que protege el núcleo contra daños mecánicos y desgaste.
• Certificaciones: Cumplen con normativas internacionales como la EN 1891, que especifica los requisitos de seguridad para cuerdas de bajo estiramiento para trabajos en altura y rescate.
• Diámetro y peso: Oscilan entre 9 mm y 13 mm, con un equilibrio entre resistencia y manejabilidad. Una sección mayor proporciona más resistencia, mientras que una menor facilita la manipulación y el transporte.

Cuerdas semiestáticas

Las cuerdas semiestáticas, también conocidas como cuerdas de bajo estiramiento, están diseñadas para ofrecer un equilibrio entre resistencia y una ligera capacidad de amortiguación, combinando características de cuerdas dinámicas y estáticas.

Características

• Alargamiento controlado: Las cuerdas semiestáticas tienen una elongación limitada, generalmente alrededor del 10% bajo carga normal. Esto permite una cierta absorción de energía en caso de pequeños impactos, mientras que aún proporcionan la estabilidad necesaria para trabajos en altura.
• Alta tenacidadd: Fabricadas con materiales como el poliéster o el nylon, estas cuerdas están diseñadas para soportar cargas pesadas y condiciones exigentes. Ofrecen una excelente resistencia a la tracción y al desgaste, asegurando su durabilidad en diversas aplicaciones.
• Construcción duradera: Su estructura suele incluir un núcleo fuerte (alma) y una funda protectora (camisa), que trabaja conjuntamente para proporcionar resistencia y durabilidad. La funda protege el núcleo del rozamiento y el daño mecánico, alargando la vida útil de la cuerda.
• Certificaciones: Las cuerdas semiestáticas deben cumplir con la norma EN 1891, que especifica los requisitos de seguridad para cuerdas de bajo estiramiento utilizadas en trabajos en altura y rescate. Dentro de esta norma, las cuerdas se clasifican en Tipo A y Tipo B:
  • Tipo A: Diseñadas para soportar el peso de una persona y el equipo adicional, son las más utilizadas en trabajos verticales debido a su alta resistencia y durabilidad.
  • Tipo B: Tienen requisitos menos exigentes en cuanto a resistencia y son adecuadas para situaciones donde no se necesita tanta robustez.

Cuerdas auxiliares (cordinos)

Las cuerdas auxiliares, también conocidas como cordinos, son cuerdas de menor grosor y menor resistencia comparadas con las cuerdas principales utilizadas en trabajos verticales. A pesar de su menor tamaño, desempeñan roles cruciales en una variedad de aplicaciones debido a sus características específicas.

Características

• Diámetro: Suele variar entre 4 mm y 8 mm. Esta menor sección los hace ligeros y fáciles de manejar, pero también limita su capacidad de carga en comparación con las cuerdas principales.
• Resistencia: Aunque no están diseñados para soportar caídas o cargas pesadas, ofrecen una resistencia suficiente para tareas auxiliares, como la creación de nudos de freno, anclajes secundarios y sistemas de poleas.
• Materiales: Al igual que las cuerdas principales, están fabricados con materiales de alta resistencia como nylon, poliéster y aramida. Estos materiales proporcionan una buena resistencia a la abrasión y a la intemperie.
• Flexibilidad: Son más flexibles que las cuerdas de más gruesas, lo que facilita la creación de nudos y la configuración de sistemas de seguridad.
• Certificaciones: Dependiendo de su uso, los cordinos pueden estar certificados bajo normas específicas, aunque generalmente no están diseñados para soportar cargas de caída como las cuerdas principales.

Materiales y construcción de cuerdas

La selección de materiales y la construcción de las cuerdas son aspectos críticos que determinan su rendimiento, durabilidad y adecuación para diferentes aplicaciones.

Materiales comunes

A continuación, se detallan los materiales más comunes utilizados en la fabricación de cuerdas.

• Nylon (Poliamida)
• Poliéster
• Aramida (Kevlar)
• Dynema (UHMWPE – Polietileno de Alta Densidad Molecular)

Ventajas y desventajas de cada material

La elección del material y la construcción de una cuerda depende de la aplicación específica y las condiciones de uso. El nylon es ideal para cuerdas dinámicas debido a su alta elasticidad y absorción de energía. El poliéster es excelente para cuerdas estáticas debido a su baja elasticidad y resistencia a la intemperie. Las aramidas, como el Kevlar, ofrecen una alta resistencia a la tracción y al calor, mientras que el Dynema es valorado por su extrema fuerza y ligereza. Cada material tiene sus ventajas y desventajas, y la selección adecuada es crucial.